Todo listo para mi décimo triatlón de distancia Ironman, una buena cifra para hacer un punto y aparte. Haga lo que haga el domingo ya tengo decidido pasarme a la distancia corta al año que viene. Curiosamente he evolucionado al revés que la mayoría de los triatletas que empiezan por la corta y luego suelen pasarse a la larga. Yo empezé en septiembre de 2003 y en mayo de 2004 ya había hecho un Ironman. Lo que me motivaba entonces, después de 35 años haciendo deporte, eran los grandes retos. A fecha de hoy doy por cumplido con creces ese objetivo, pero el caso es en estos 7 años me he hecho triatleta. He aprendido a nadar decentemente, en bici me defiendo bastante bien y de vez en cuando corro rápido. Eso me permite disfrutar mucho de las competiciones cortas locales a las que pienso dedicarme el año que viene.
Para el Challenger he entrenado más o menos de la misma manera que el año pasado, así que espero hacerlo igual de bien, pero corrigiendo los errores. En la natación tengo 2 minutos menos si no me cruzo de boya a boya, en bici también tengo 3 ó 4 minutos menos aunque solo sea por la ruedas nuevas que tengo (aunque parece que este año va a hacer algo de viento) y corriendo tengo 9 minutos menos si corro igual que en mayo en el Ironcat y soy capaz de comer más durante la maratón. ¡Uff que pereza me daaaaaaaaaaaaaaaaaao¡Así las cosas con bajar mi marca me conformo y si hago 9h 45' me pondré un sobresaliente en mi "último" Ironman (entre comillas porque supongo que volveré).
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